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viernes, 26 de enero de 2018

Cuando el ser humano es el principal enemigo de la naturaleza

Introduciéndonos en el concepto de ecosistema.
En las clases de Ciencias de la Naturaleza, se enseña que el medio ambiente se encuentra conformado por partes, entre ellas el ser humano.
La definición de ecosistema"Un sistema biológico constituido por una comunidad de organismos vivos y el medio físico donde se relacionan" (Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Ecosistema)

Casos testigo: Desastre ecológico en Mendoza y la invasión de peces carnívoros.
Observemos los siguientes videos, para someterlos a un análisis.

Video N°1. Extraído del siguiente enlace http://www.mdzol.com/video/777258-tragedia-ecologica-hallaron-34-condores-muertos-en-mendoza/




Video N°2. Extraído del siguiente enlace https://youtu.be/1aSVUySl57I

Cada animal juega un rol importante en sus respectivos ecosistemas.

Actividad N°1: Lo que puede trabajarse en el aula con los estudiantes: Completar el siguiente cuadro.
La estrategia de dividir en grupos a los estudiantes y que comiencen con la técnica de "brainstorming" o tormenta de ideas, al intentar explicar cuáles son las posibles causas que provocaron, por un lado la tragedia ecológica de Mendoza y por otro lado la invasión de las palometas.
Se espera que las posibles respuestas sean: Depredación natural o muerte por envenenamiento de los cóndores. Exterminio de los depredadores naturales de las palometas.


Sobre los cóndores.
El cóndor andino (vultur griphus) es un ave enorme que se encuentra entre las más grandes del mundo capaces de volar. Dado su gran peso (hasta 15 kilogramos), incluso su ingente envergadura de alas (3 metros) necesita algo de ayuda para mantenerle en el aire. Por ello, estas aves prefieren vivir en zonas ventosas, donde pueden planear sobre las corrientes de aire sin gran esfuerzo. Los cóndores andinos viven en zonas montañosas, como su nombre sugiere, pero también cerca de las costas, donde abundan las brisas marinas, e incluso en desiertos con fuertes corrientes térmicas de aire. Estos cóndores suelen ser negros, pero tienen un característico «collar» blanco, además de algunas marcas del mismo color en las alas. Al igual que sus parientes, los cóndores californianos, los andinos lucen cabezas calvas. 
Los cóndores son buitres; por eso sus certeros ojos siempre están atentos en busca de carroña, que compone la mayor parte de su dieta. Prefieren alimentarse de animales  grandes, ya sean salvajes o domesticados, y al consumir sus cuerpos realizan una importante labor como barrenderos de la naturaleza. En la costa, los cóndores se alimentan de animales marinos muertos, como focas o peces. Estas aves carecen de las afiladas garras de los depredadores, pero pueden asaltar nidos en busca de huevos o incluso polluelos. Estas longevas aves han sobrevivido más de 75 años en cautividad, pero se reproducen lentamente. Cada pareja reproductora solo tiene una cría cada dos años, y ambos progenitores deben cuidar de ella durante un año entero. El cóndor andino es una especie amenazada, pero su situación es mucho mejor que la de su primo de California. Actualmente hay cerca de varios miles de cóndores sudamericanos en libertad, y los programas de reintroducción están trabajando para elevar su número. (Fuente: http://www.nationalgeographic.es/animales/condor-andino)
Sobre las palometas.
Su nombre científico serrasalmus spilopleura, vulgarmente conocida como palometa de río, palometa brava o piraña. Con un dorso gris plomizo, vientre amarillo al igual que los opérculos y las aletas pares. Se desplaza muy velozmente y generalmente reunidos en cardúmenes de alta concentración de individuos. Es un predador nato, en su dieta intervienen todo tipo de peces y tamaños. Son muy voraces, ataca a otros animales e inclusive al hombre. Es un pez carnívoro y cazador, le resulta muy atrayente el olor a sangre que es capaz de percibir a la distancia. Abunda en aguas templadas y cálidas. Se distribuye geográficamente en los ríos: Paraguay, Uruguay, Paraná y de La Plata. (Fuente: http://tigre.galeon.com/textos/fauna/palometa.htm)
Los depredadores.
Los cóndores no cuentan con depredadores naturales, aunque directa o indirectamente el foco se halla en el hombre. En el caso de las palometas, el dorado (Salminus brasiliensis) y el yacaré (Caiman yacare) son los depredadores naturales.
Brillenkaiman Caiman yacare.jpg
Caiman yacare
Dourado(Salminus brasiliensis)emBonito.jpg
Pez dorado










Es evidente que, en un caso se apunta hacia un depredador de manera directa y es el hombre. Y en otro caso, el avance de las palometas se debe a la ausencia de depredadores naturales que, de una u otra forma, también señalan al hombre como responsable.

Actividad N°2: Puede realizarse la siguiente actividad con los estudiantes.
Con la información suministrada los estudiantes se hallarán en condiciones de completar el cuadro describiendo, entre otras cosas, si se trata de aves, peces o caimánido endémico.

La legislación vigente.
Cuando se realizó la actividad N°1 se pensaron en posibles causas a las que pudieran atribuirse los hechos ocurridos. 
En el caso del cóndor andino, por no contar con depredadores naturales, el ser humano, por ignorancia toma decisiones que van en contra de su propio hábitat, por tal motivo, la legislación vigente Ley de Fauna 22421 a la cual adhiere la provincia de Mendoza, en cuyo artículo 15 establece: "[...] entiéndese por Caza la acción ejercida por el hombre, mediante el uso de artes, armas y otros medios apropiados, persiguiendo o apresando ejemplares de la fauna silvestre con el fin de someterlos bajo su dominio apropiárselos como presa, capturándolos, dándoles muerte o facilitando estas acciones a terceros"
En consonancia, la Resolución N°924 - Anexo I establece multas por cada ejemplar, según el grado de agravante categorizado como: leve, grave y muy grave.
Para el caso de los cóndores muertos por envenenamiento corresponde una multa de $222250 por cada ejemplar.
En el caso del Dorado, desde Abril de 2005, se encuentra promulgada la Ley 26021 declara al Dorado (Salminus maxillosus) pez de interés nacional, prohibiendo su pesca en su ámbito natural con fines comerciales. Asimismo solicitan en dicha Ley que otras provincias se sumen a la ley para proteger la especie.
Lamentablemente, el incumplimiento de la ley se pone en evidencia cuando las palometas invaden las costas del río. Nuevamente el accionar del hombre pone en juego el ecosistema del cual forma parte.
Por su parte, la provincia de Entre Rios, a través de la Ley N°4841 prohíbe por tiempo indeterminado la caza, el tránsito, comercio o explotación de cualquier forma del cuero o productos provenientes del yacaré.
Sería interesante lograr que, al igual que la iniciativa del Dorado, otras provincias se hagan eco de la iniciativa.

Buscando la sensibilización.
Desde la Fundación Bioandina piden dar a difusión el siguiente video:

Por último, un video realizado por la artista Bárbara Daniels en el que pueden observarse imágenes donde los seres humanos son tratados como se tratan al resto de las especies. Otra manera de pensarnos como parte de un ecosistema vivo en el que deben coexistir las especies de manera pacífica.

Desde otros espacios curriculares puede trabajarse la temática ya sea, presentando murales, afiches, articulando con diferentes fundaciones destinadas a la protección de especies en peligro de extinción. Un tema del cual no somos ajenos y al cual debemos estar atentos por nosotros y por las generaciones venideras. No basta con describir a las especies como un simple tema de estudio,  no es un tema de moda, debemos reconocernos como parte y asumir nuestras responsabilidades que generan un impacto directo o indirecto, pero impacto al fin.